Que la felicidad sea el camino, no la meta
En la víspera del 2020, recibí un texto por parte de una colega, que me encantó. Lo compartí en varias plataformas de redes sociales, y ahora toca por este medio. El texto ha sido escrito por Mirta Medici, psicóloga argentina, y dice así:
No te deseo un año maravilloso, donde todo sea bueno. Ése es un pensamiento mágico, infantil, utópico. Te deseo que te animes a mirarte, y que te ames como eres.
Que tengas el suficiente amor propio para pelear muchas batallas, y la humildad para saber que hay batallas imposibles de ganar por las que no vale la pena luchar.
Te deseo que puedas aceptar que hay realidades que son inmodificables, y que hay otras, que si te corres del lugar de la queja, podrás cambiar.
Que no te permitas los "no puedo" y que reconozcas los "no quiero".
Te deseo que escuches tu verdad, y que digas, con plena conciencia de que solo es tu verdad, no la del otro.
Que te expongas a lo que temes, porque es la única manera de vencer el miedo.
Que aprendas a tolerar las "manchas negras" del otro, porque tambien tienes las tuyas y eso anula la posbilidad de reclamo.
Que no te condenes por equivocarte, no eres todopoderoso. Que crezcas, hasta donde y cuando quieras.
No te deseo que este año te traiga felicidad. Te deseo que logres ser feliz, sea cual sea la realidad que te toque vivir.