Una danza existencial
Un espacio existencial para habitar desde la danza encontrando a la misma como un puente hacia lo cotidiano, un espacio donde reflexionar nuestro ser-en este mundo. Un espacio de convergencias, interrogantes, y de transitar umbrales.
Una danza actualizada, original, auténtica que devela que nos movemos siendo parte del ecosistema de las fuerzas de la naturaleza. Aquí entramo con la actualización del autoconcepto que propone la Gestalt, una actualización constante, donde reside el siendo. Necesitamos actualizar nuestro autoconcepto, de allí la potencia.
Existencial referencia al ser-siendo, somos en el hacer, y desde el hacer el ser. Investigar-se desde el danzar.
En este sentido, Estevez (2022) menciona que nombrar o escribir acerca de la propia investigación es una manera de continuar con la investigación misma. Se trata de traducir el suceso de lo múltiple y complejo y, al mismo tiempo, abrir nuevas preguntas y relaciones entre práctica y teoría, donde “lo que queda de la danza es una manera de pensar, es un modo de pensar la vida” (p. 292). El hecho de poder contactar con lo que nos sucede habilita que la danza auténtica se visibilice. Un reconocer desde el del Darse Cuenta y desplegar en una danza que soy, no sólo que "me represente”, sino realmente: soy siendo danza. El “pasar por el cuerpo”, “encarnar”, implican contacto y presencia.
Un espacio existencial que promueva el encuentro con lo propio y desde allí desplegar la danza, proceso que no se trata de dejar lo aprendido, o de dejar técnicas y saberes previos, sino integrarlos-deglutirlos-masticarlos e incorporarlos desde el mismo ser, una base de la cual partir, un proceso espiralado, donde en cada pasaje algo nuevo sucede.
Referencias mencionadas
Estevez, E. (2022). A-UN Impulso, acerca de mis procesos de investigación en danza. En Berdet, M.; Tampini, M.; Zuain, J. (comp.), Improvisación en danza. Traducciones y distorsiones (pp. 282-297). Editorial 2 (da) en Papel. (Texto escrito en 2022)
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